Gris Montevideo que te acoplas
tan bien con la tormenta invernal.
Desde los edificios, el cielo
y la gente. Todo es tan gris.
Las ventanas empañadas y los truenos.
La calle mojada
y la gente tan opaca,
solo brilla en la mirada
fresca e inocente de un niño.
Cuanto pesa el frío
en esta gris locura.
De a ratos se ve un destello de luz
en las caderas de una muchacha,
pero dura tan poco
como su juventud.
Esta llovizna que moja
maletines y sobretodos
hace pequeñas olas en los charcos.
Montevideo, no me hables, no me mires,
desapercibido te atravieso
sin importarle a nadie.
Paraguas abiertos de redor,
no es tan difícil secar una solapa,
mojarse cada tanto sin dejar sal en el pañuelo.
Gris personalidad atractiva, Montevideo,
que solo revives por las noches.
1 comentario:
Nico,
Samuel por supuesto. Conocí esta pagina por ustedes, y grandioso lo que han podido escribir. Siempre hay tanto para conocer que lo dejo en manos del tiempo. Esta parte de ustedes ahora, y por supuesto tendrán muchas más cosas. Pero vivimos cerca, el blog es casi como una locura... Igual podemos visitarnos a nuestros blogs, veo que hay mucha gente dentro aqui
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