sábado, 26 de enero de 2008

Ceja (Martín Cedrés)

adiós ceja
ahí te va esta voz
que se aleja con vos
adiós ceja

que tus piernas tiemblen lo demasiado
como para encontrarte incapaz
en la calle empedrada de malas compañías…
anda nomás

decí que con túnica
fuiste niño y aspirante
a la buena educación
decí que la blanca pasma

te sacudió los miembros
y te lanzó al túnel rojo de tus miradas
a la turba cuadra
de tus andanzas

andá ceja andá
perfílate con el humo
y tiembla demasiado
así la pena se acuerda

de que algún día
fuiste verdadero
y que no hubo faso
que no hubo

adiós ceja
ahí te va mi voz
olvídate del abrazo
no hay nada más para vos

viernes, 25 de enero de 2008

Verde (Nicolás Gramajo)

Verde como las notas
en la botella del náufrago,
verde como las poesías
en las paredes de la prisión.

Verde como un niño
en un orfanato,
verde como el amor,
como los sueños.

Verde como un carrera,
como el próximo libro,
verde como el día de mañana,
o los estómagos desnutridos.

Verde como la carta del exiliado,
como las putas en el cabaret,
verde como la familia de los desaparecidos,
como un niño en Navidad.

Verde como las caricias
en el vientre de una embarazada,
verde como la revolución,
como el llamado que nunca llegó.

Verde como las alianzas
y las noches de bodas,
verde como la ciencia
o cualquier religión.

Verde como un enfermo,
como un loco, o como yo;
todo se pinta de verde,
el último color que queda en mi paleta.

Blanca Margarita (Nicolás Gramajo)

Es amargo el polen amarillo
que llora la triste margarita
mientras se ve morir
adornando un florero,
con los pétalos arruados y recogidos,
queriendo así abrigar su centro,
como quien cuida un hijo.

Mirando hacia un costado,
viendo a sus hermanas morir
sin poder hacer nada,
sufriendo su impotencia
y viendo pasar las pilas del reloj
en la habitación desolada,
esperando su cercana
e inevitable muerte marrón,

mientras recuerda su pasado
en el jardín de las maravillas,
dándole los buenos días
al sol y la tierra,
a sus bichos y pestes,
alimentando abejas y picaflores
que osaban chuparle la sangre.

Prefería morir sola
o antes que las demás,
pero no quiere seguir cargando
con tanta muerte en sus ojos,
prefería morir inventando
la buena o mala fortuna
de un ingenuo enamorado,

pero no agachando la cabeza,
colmándose de pliegues,
suicidando su belleza
sin testamento ni legado,
sin descendencia ni fuerzas.

Caminar ("Sancho Panza")

Llegando a las dos décadas se pone a pensar
no encuentra el camino, la estrella que lo guíe
tiene miedo de avanzar, no sabe donde ni cuando
si el destino existe o es cuestión de azar

Su alma tiene muchas metas por lograr
tiene un puñado de ilusiones, mil confusiones
ronda la sombra del tedio y el miedo al fracaso
quien sabe por donde empezar a buscar?

Mirando el presente se para y empieza a observar
ya sabe que nada será fácil, no hay aciertos sin errores
tendrá que aprender a nadar en el lago del albedrío
hasta llegar a tierra firme y aprender a caminar

Cuestionario III (Nicolás Gramajo)

Una palmada en el hombro
y el ensordecedor chillido del silencio,
solo eso quedó de aquel pacto.

Nunca mas supe nada de ella
supongo que supo esquivar las balas.
que supo donde escondérsele al dolor.

Solo tres peguntas y dos respuestas,
la tercera se contestó sola,
una mirada al pasto y un gran mutismo.

Una supuesta verdad, con miedo,
una sutil y desgarradora mentira
y un afilado silencio que atravesó mis costillas.

Ese era todo el cargamento de mi mochila,
la que esperaba un largo viaje
sin paradas ni distracciones.

Sin un beso de despedida me fui,
caminando solo, por rutas ya transitadas
ahora llenas de pozos y desengaños,

mientras ella quedó esperando
el próximo tren que la deje frente a su puerta,
sin pena ni neuralgia.

Ahora ya no ("Sancho Panza")

Ahora no espero que llegue el tiempo del bienestar
Ya no comparto sólo las tardes de playas
Ahora no tengo que volver al pasado de vez en cuando
Ya no tengo en mi cabeza tiempo que perder
Ahora estoy feliz de saber que hay vida en la tierra
Ya no hay noches vacías ni soledad
Ahora no me importa si la lluvia me moja
Ya no tengo una vida que derrochar ni muertos en el placard
Ahora es el tiempo del hoy y del mañana
Ya no importa el pasado pisado

Ahora ya no hay vestigios de oscuridad
Ahora ya no tengo que vivir para los despilfarres

Ahora soy feliz

En la borra de mi café (Nicolás Gramajo)

Fue lindo verte de nuevo
rozándonos la punta de la nariz,
encontrar tus ojos en nuestra boca,
aunque no fueras tu,
aunque quizás no haya sido yo.

Ese instante que me hizo reír,
una superposición de imágenes
aparecieron en secuencia
ante mis ojos cuando creí no verte más,
despertando un recuerdo dormido
que ahora, intermitentemente aparece
para ocasionarme un temblor.

Solo un flash back,
una imagen en la borra de mi café,
como si siempre hubieras estado ahí,
esperando a salir, cuando menos me lo esperaba,
cuando menos te necesitaba,
una mezcla entre sueño y realidad.
Una mancha húmeda en mi diario
que tiñe al resto de las hojas.

Malena (Nicolás Gramajo)

Malena, niña Malena,
que me llenas el vaso con las poesías
en las que me embriago cada noche.

Malena, tu que más que cantarlo,
escribes el tango como ninguna,
que me lo bailas en tu fina cintura
y tu cara de niña, tu cara de ángel.

Malena, que en cada verso
pones más que todo tu corazón,
dejas tu alma entera palabra tras palabra,
que tus versos se escurren en mi alma
como la fina arena
que se escabulle entre mis dedos.

Malena, ¿Quién te sopla
tanta hermosura al oído?
¿en que pradera cosechas tantas flores bellas?

Sueña mi niña Malena,
sigue soñando,
píntame una sonrisa y una realidad fantástica,
escríbeme un soneto por cada angustia,
y otro por cada alegría.

Envuélveme, abrázame, acaríciame
y llévame volando con tus letras,
arrástrame por el piso
y levántame con tus melodías,
bésame los tímpanos con tus palabras
y hazme sangrar con tus lágrimas,
pero no te olvides mi pequeña Malena
de vivir tu propia vida,
de jugar tu propia partida,
de escribir tu propia historia.

domingo, 20 de enero de 2008

Adiós (Sabrina Pérez)

Despertaré sin tu mirada oculta entre mis sábanas,
Sin tus besos tatuados en mi cuello
Sin tu aroma impregnada en mi piel,
Sin el murmullo de un adiós fiel.
A partir de ese momento ,
el reloj marcará la hora de mi ser
nuevos sueños me guiarán,
el guión de la película cambiara.
Se estrenará una esperanza que no te nombra,
Una canción escrita por el presente
Ya no escribiré la nostalgia de tus besos,
Borraré de mi mapa todo recuerdo.
Me desato de este mal estar,
mis ojos vuelven a brillar
mis pasos no van tras tus pasos,
mi corazón no va en busca del pasado.
¡ Hoy! te libero de esta historia perdida,
ya no hay túnel sin salida,
respiro un aire que me motiva
¡ Hoy! no me doy por vencida.
Quiero sentir esa hermosa sensación,
Respirar aire lleno de amor
La vida te sorprende sin preguntar,

Es una buena oportunidad para volver amar.

Desorientada (Sabrina Pérez)

Tantas locuras inconscientes,
realizadas con un mismo fin
me envuelve el dolor de perder,
me abrazan las ganas de volver
Tantas esperanzas marchitas
se ocultan debajo de mi piel
en el espacio habita mi yo,
en el suelo, las huellas de este amor.
Tantas páginas en blanco,
hojas escritas por el llanto
el desencanto de tu voz,
opacó el espíritu del corazón.
Tantos caminos transitados,
un viajes insólito atemorizante
se pierde mi esencia, mi pensar
me hundo en el vacío, rescátame ya.
Tantas recetas para olvidar,
pero es imposible de realizar
sos la muerte mas agradable,
pero no me lleves , no me atrapes.
Tantas las heridas que no cicatrizan,
el milagro de vivir vuelve inesperadamente
pero mi sangre te nombra sin importar,
cuanta soledad siento al avanzar.
Tantas lágrimas que guardo en mi mirada,
el solo pensar en terminar algo ya acabado
hace que se consuma el silencio,
de tantas palabras.
Tantas copas llena de nada,
el sol se oculta, no hay luna amada
la lluvia al ritmo de mi llanto,
mojada por tanto engaño.